Un edificio urbano, un ejercicio de integración

El reto del proyecto ha consistido en inserir dentro de la trama urbana de un casco antiguo de casas bajas y calles estrechas el volumen construido de un equipamiento del carácter y la envergadura de un archivo. La decisión de emplazar el Archivo Comarcal en la trama urbana de Santa Coloma de Farners responde a la voluntad de dar valor a esta actividad, normalmente ubicada en las áreas suburbanas de las poblaciones, asignándole un lugar privilegiado, visible, accesible, es decir, insiriéndola en la vida del pueblo. No solo la actividad del archivo debe gozar de este emplazamiento, sino que es el propio archivo quien con este emplazamiento quiere mostrar su actividad e invitar a utilizarlo como edificio más público.

Teniendo en cuenta que, además, dos terceras partes de este tipo de edificios van destinadas al depósito de documentos –función que exige espacios cerrados, protegidos y de casi nula relación con el exterior–, ubicar un edificio eminentemente opaco en esta esquina tan urbana exige una adecuación volumétrica al entorno construido que ha convergido, por un lado, en una decisión de tratamiento de la fachada y, por otro lado, en una clara separación programática que ha permitido una planta baja abierta y pública.